Piratas, corsarios y filibusteros

Muchas veces se emplean las palabras piratacorsario y filibustero como sinónimos. Aunque básicamente se trata de gente dedicada al robo y al saqueo en los mares, hay diferencias esenciales. Los piratas son delincuentes organizados que cuentan con una o varias embarcaciones y roban a otras para su propio beneficio. Los corsarios hacían lo mismo pero auspiciados por el gobierno de alguna nación para que atacaran únicamente barcos de países rivales. A cambio, obtenían alguna consideración pues si eran capturados se les trataba como prisioneros de guerra y no como simples criminales. También estaban obligados a ceder una parte de sus ganancias al gobierno que los protegía. Los filibusteros se caracterizaban porque, a diferencia de piratas y corsarios, no se adentraban en altamar y limitaban sus actividades a la costa y a pueblos cercanos a ella.

5 Replies to “Piratas, corsarios y filibusteros

  1. Tiene gracia -si no fuera por lo grave del asunto dado el origen último de la acción-, que los piratas sean considerados «criminales» y los corsarios haciendo lo mismo sean protegidos, ¿por qué? En los siglos del colonialismo duro los piratas asaltaban, robaban y mataban por cuenta propia y de existir entonces el concepto actual del terrorismo serían terroristas; en cambio los corsarios robaban y también mataban pero una parte de esos tonos los hacían para la Corona, por eso eran protegidos. ¡Ay Señor, Señor…!

  2. El permiso de corso, del cual gozaban los corsarios, era el documento que otorgaban las autoridades europeas a sus navegantes para someter a la esclavitud a las personas. Europa en su afán de expansión sometió a los aborígenes de toda América y así trastocó el desarrollo de los imperios americanos.

  3. Mmm, en realidad es al revés. El pirata robaba para la corona y era un mercenario, la mayoría de estos eran de origen inglés. El corsario era contratado para causas de guerra independentistas, siendo en su mayoría de Irlanda del Sur. Un claro ejemplo de un corsario irlandés contratado por el Gobierno argentino fue el «Almirante Brown» (nacido bajo el nombre de William Brown en Foxford, Condado de Mayo, Reino de Irlanda, 22 de junio de 1777 – fallecido en Buenos Aires, 3 de marzo de 1857); fue el primer almirante irlandés naturalizado argentino de la fuerza naval de la Argentina que consagró su vida al servicio de su patria de adopción, por lo que es considerado el padre de la Armada argentina. William Brown ha luchado en la resistencia ante sucesivas invasiones inglesas, portuguesas y francesas.

    La fuente de lo que digo es la propia historia Argentina. Acá, aunque muy resumida, cito a Wikipedia.

    En cuanto al origen del término, se sabe de manera popular que corsario era el nombre que se le daba a todos los que han luchado en guerras por la independencia siendo estos muy diferentes a los piratas; prácticamente eran la guerrilla naval de la época.

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