El investigador Fitzroy Richard Somerset, cuarto barón Raglan, a partir del estudio de vidas de héroes legendarios –tales como Edipo, Teseo, Rómulo, Hércules, Perseo, Moisés, Sigfrido, Arturo y otros–, delimitó 22 rasgos comunes a la mayoría de ellos. Llamó a ese conjunto de características «El arquetipo del héroe mítico».

Son las siguientes: 1) su madre es una virgen; 2) su padre es un rey; 3) frecuentemente el padre también es un pariente cercano a la madre; 4) las circunstancias de la concepción son inusuales; 5) llega a decirse que el héroe es hijo de algún dios; 6) cuando nace, hay algún intento de matarlo; 7) alguien salva al héroe y se lo lleva lejos; 8) es educado por padres adoptivos; 9) no se sabe nada sobre su infancia en ese periodo; 10) cuando se convierte en hombre, regresa o va a su futuro reino; 11) derrota a algún rey, gigante, dragón o bestia; 12) se casa con una princesa, frecuentemente la hija de su predecesor; 13) se convierte en rey; 14) reina durante algún tiempo; 15) proclama leyes; 16) pierde el favor de los dioses o de sus súbditos; 17) es desplazado del trono y del reino; 18) su muerte es misteriosa; 19) su muerte usualmente ocurre en la cima de una colina; 20) si ha tenido hijos, ninguno de ellos será su sucesor; 21) su cuerpo no es sepultado; 22) sin embargo, tiene uno o más sepulcros sagrados.